El coronavirus llego y como ya bien sabemos cambio la forma de vida de todos, los solteros, los casados, los que vivían juntos, y los novios que vivían separados.
Los que comparten el mismo techo, de pronto se encontraron con que iban a tener que convivir las 24 horas del día en el mismo espacio con su pareja, así que dependiendo de cómo lograron manejarlo se encontraron con diferentes posibilidades. Unos sin haberlo planeado tuvieron una especie de de inevitable rencuentro, debido a que la vida los obligo a convivir muy de cerca, has
ta podría decirse que tuvieron una especie de re enamoramiento. El problema del enamoramiento es que uno siempre niega todos los aspectos malos del otro, precisamente para poder enamorarse y así iniciar una relación, es necesario. Pero la fantasía, tarde o temprano se encuentra con la realidad, y si utilizaste esta opción todo el tiempo, tarde o temprano los problemas volverán a hacerse presentes y quizás aun más fuerte.
Otros se enfrentaron directamente desde el inicio a los inevitables problemas que trajo este confinamiento y probablemente empezaron a discutir mucho más de lo que lo hacían antes, porque justamente compartir todos los espacios todo el tiempo requiere de dividirse las tareas de la casa, comunicarse y poner cada uno de su parte; seguramente hasta terminaron descubrieron cosas del otro que no sabían antes. Si esto se logró, probablemente habrán alcanzado un nivel distinto de profundidad en su relación y habrá resultado productiva esta cuarentena juntos.
Sin embargo los que habían elegido anteriormente a su pareja, sin haberse dado cuenta de que escogieron basándose en sus necesidades o intereses personales y que fácilmente solían huir de su relación de diferentes maneras, muy probablemente ya no sepan que hacer con el otro. Porque vivir realmente en pareja requiere de mucha paciencia, empatía con el otro, renuncias y negociaciones a la que no habían querido enfrentarse o tener que ceder. Muchas de estas parejas tristemente no lograron sobrevivir al encierro por las mismas dificultades.
Los solteros también se enfrentaron a una nueva realidad para convivir y ligar en el confinamiento; algunos estaban muy acostumbrados a estar todo el día fuera de casa, trabajando , con los amigos, en las fiestas, ligando , viajando , en fin muy ocupados incluso hasta para tener una pareja. En varios casos, esto resulto una excelente oportunidad para contactar con ellos mismos y reconocerse solos, sobre todo ahora que la fiesta desapareció y las posibilidades de distraerse son menos. Si aprovecharon esta oportunidad, pudo ser una motivación para conocer una pareja a distancia, lo cual de alguna manera extraña, resultó menos amenazante y pudieron abrirse más fácil.
Finalmente están las parejas que son novios y viven en distintas casas, los cuales se enfrentaron a una complicada situación, ya que cualquiera de los dos podrían ser portadores del virus y estaba presente la posibilidad constante de contagiarse al frecuentarse, no solo entre ellos ,sino también a sus familiares con los que cada uno vive. Sin embargo tambien el distanciarse tanto tiempo de la pareja, resulto una mayor amenaza para la relación, por lo que si ambos no luchaban al respecto en establecer una confianza sobre la salud del otro y poner cada uno de su parte para poder verse, probablemente se termino la cercanía, la intimidad y también la relación.
Para algunos desafortunadamente este fue su desenlace, porque no pudieron sostenerse en las nuevas condiciones adversas de la distancia; sin embargo en estos casos, será una buena oportunidad de reflexión para repensar quienes han sido y hacia donde van. Pero también se corre el riesgo de quedar encerrados todo el día con los padres en casa, en una especie de regresión a la infancia, como cuando eran niños y únicamente o mayoritariamente convivían con la familia sin tener que preocuparse por el mundo exterior.
Sin embargo hubo muchos otros casos a los que esta situación, aunque les puso su relación a prueba, lograron sobreponerse y eventualmente se las ingeniaron para poder estar juntos. Aunque tuvieran que enfrentarse al miedo de los familiares al visitar a la pareja y aunque se vieran con menos frecuencia que antes, lo cual lo extrañamente se convirtió en algo mas romántico ,que cuando podían verse siempre. Por lo que esta adversidad también pudo ser, una excelente oportunidad de fortalecer la relación e incluso al terminar esta situación logren darle otro nivel a su relación.
Todo esto, me lleva a pensar que las relaciones de pareja son muy similares a las plantas, sin importar la maceta, el espacio donde las coloques o el propósito para que las tengas, si no las riegas y las cuidas todos los días, se mueren. El cambio drástico de las condiciones de vida que teníamos antes, saco a la luz la realidad, el compromiso y la fortaleza de cada relación de pareja.